Requisitos para el cambio de nivel en natación: de Preescuela Baja a Preescuela Alta
En nuestra piscina, cada niño y niña avanza a su propio ritmo, descubriendo la magia de moverse en el agua y ganando confianza a medida que adquiere nuevas habilidades. Para guiar a las familias en este emocionante proceso, queremos explicar cuáles son los requisitos que consideramos para pasar de la preescuela baja a la preescuela alta. Este cambio de nivel es un momento importante en la formación acuática, ya que significa que el niño está listo para enfrentar nuevos desafíos en el agua.
¿Qué Habilidades son necesarias para pasar de nivel?
El cambio de nivel no solo depende de la edad del niño, sino principalmente de su desarrollo en el agua. A continuación, detallamos las habilidades que valoramos para este cambio:
1. Flotación Dorsal y Ventral: Mantenerse Tranquilo en el Agua
En este nivel, es fundamental que el niño pueda realizar la flotación dorsal y ventral, también conocida como «hacer el muerto». La idea es que logre mantener la calma mientras flota, tanto boca arriba como boca abajo, durante unos segundos. Esta habilidad demuestra que el pequeño ha ganado confianza en el agua y es capaz de manejar su cuerpo con cierta independencia.
2. Iniciación a la Coordinación de Respiración y Desplazamiento
Uno de los aspectos más importantes para el cambio de nivel es que el niño empiece a coordinar su respiración con el movimiento. Esto incluye el descubrimiento del ritmo respiratorio: entender cuándo inspirar y expirar mientras se desplaza en el agua. Esta fase es clave, ya que preparar la respiración es esencial para nadar correctamente.
3. Respiración en Crol con Apoyo de Material Auxiliar
El siguiente paso es comenzar a familiarizarse con la respiración en crol, utilizando material auxiliar para facilitar el aprendizaje. Queremos que los niños aprendan a respirar correctamente mientras se desplazan, lo que implica girar la cabeza hacia un lado para tomar aire mientras siguen moviéndose en el agua.
4. Técnica de crol, espalda y braza
Para avanzar a la preescuela alta, el niño debe demostrar que comprende la técnica básica de estos tres estilos.
En crol:
- Mantener un batido constante de piernas mientras se desplaza, generando una propulsión adecuada.
- Empezar a sacar los brazos del agua en la fase aérea del crol, trabajando en la coordinación de las extremidades.
- Completar un largo en la piscina, manteniendo una posición adecuada y sacando los brazos del agua, mientras salpica con los pies.
En espalda:
- Mantener un buen batido de piernas en la técnica de espalda.
- Lograr mantener una posición horizontal en el agua mientras se desplaza de espaldas.
- Completar un largo en estilo espalda, coordinando correctamente el movimiento de brazos y piernas.
En braza:
Para la braza, nos centramos en el aprendizaje de los movimientos básicos de piernas y brazos:
- Iniciar el aprendizaje del movimiento específico de las piernas para la braza.
- Empezar a practicar el movimiento de los brazos en la técnica de braza, preparando al niño para un estilo más complejo.
Competencias Sociales: Trabajo en Grupo y Actitud en Clase
Además de las habilidades físicas, consideramos muy importantes otros aspectos:
- Integración en el grupo: El niño debe sentirse cómodo trabajando en grupo, participando en las actividades y colaborando con sus compañeros.
- Mantener el orden en clase: Es fundamental que siga las instrucciones del instructor, manteniendo el orden durante las sesiones.
- Comprensión y entendimiento de los ejercicios: El niño debe demostrar que entiende las instrucciones y es capaz de seguirlas con precisión.
- Interés por el aprendizaje: Finalmente, buscamos que el niño tenga una actitud positiva hacia el aprendizaje, mostrando interés por mejorar sus habilidades.
Sabemos que cada niño tiene su propio ritmo de aprendizaje, y nuestro objetivo es que disfruten de cada etapa del proceso. Los cambios de nivel no son una competencia, sino una forma de asegurar que cada pequeño nadador esté listo para enfrentar nuevos retos con confianza y seguridad. Invitamos a las familias a seguir acompañando y apoyando a sus hijos en este proceso, y a confiar en el criterio de nuestros instructores, que valoran cuidadosamente el progreso de cada alumno para decidir cuándo es el momento adecuado para cambiar de nivel.
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